Nuestra historia
La ciudad alfarera de Totana se ubica en las faldas del parque regional de Sierra Espuña, en el corazón de la región de Murcia.
A mediados del siglo XVI comienza una larga tradición alfarera que llega hasta nuestros días.
Nuestra actividad alfarera comienza en 1920 en la zona conocida como las Tinajerías, junto a la rambla de Totana.
La arcilla, nuestra materia prima fundamental, se obtenía con la mezcla y posterior decantación de agua de pozo y las tierras de Totana, las cuales poseen una gran calidad para la elaboración de productos alfareros.
Con las manos expertas del alfarero se daba forma a tinajas, orzas o lebrillos, era una actividad esencial que producía utensilios de uso cotidiano: que servían para el almacenamiento de agua, vino y aceite o la cocción de alimentos.
Para la cocción de la terracota, la alfarería contaba con dos hornos morunos construidos con ladrillos de adobe, y entre los materiales de combustión se utilizaba leña de Sierra Espuña, cáscara de almendra y huesos de aceituna.